Villa La Angostura, el Jardín de la Patagonia posee paisajes bellísimos que en verano se pueden disfrutar increíblemente a través de navegaciones en el Nahuel Huapi o visitando sus emblemáticos Arrayanes, a los cuales se puede acceder caminando, en bicicleta o también a través del agua.
En esta época prevalecen los verdes vibrantes enmarcados por montañas con escasa nieve en sus picos, flores exóticas, fauna silvestre, aguas límpidas y transparentes casi como espejos. Todos los colores se exaltan con el sol y la frescura del paisaje y del aire que se respira se convierten en un estímulo para la vida al aire libre.
También sus playas son un paraíso, aguas extensas circundadas por el verdor de los bosques. En estos parajes todo se convierte en excusa para recorrer realizando tranquilas caminatas o cabalgatas, paseando en embarcaciones o por qué practicando actividades de aventura.
Y como si esto fuera poco la cocina patagónica ha alcanzado estándares internacionales combinados con lo mejor de la cocina propia.
A tan solo 70 km. de Bariloche, Villa La Angostura es una propuesta más que nos regala nuestro sur.
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