Su nombre parece salido de un cuento y justamente son los cuentos y relatos de la cultura oral los que afirman que allí se encuentran enterrados grandes tesoros de oro, los cuales pertenecían al Mariscal Solano López, quien los mandó a enterrar en su camino de escapada hacia Asunción, cuando era perseguido por los hombres de la Triple Alianza.
Con estas dotes de misterio y un paisaje asombroso, pasar un día en esta isla es una excursión atrapante. La naturaleza de Formosa se expresa plenamente en estos parajes, dando lugar al avistaje de aves y forestación, haciendo plácidos paseos en canoa o canotaje en Kayak. Para los que prefieren el terrero, hay senderos para trekking,
El destino posee el camping de Odisea con amplias comodidades como el agua potable, energía y mobiliario adecuado para no resignar bienestar.
También se han montado juegos como la tirolesa, muros para escalar, metegol, camas elásticas para saltar, redes de abordaje, tiro al blanco, juegos de supervivencia, todo para que los más chicos también puedan jugar.
Se suma a todo esto la disponibilidad de andar en bicicletas que se alquilan en el lugar, para recorrer el terreno o realizar rodadas al corazón de la isla.
La Isla de Oro queda a unos minutos del centro de la ciudad capital, a la vera del Riacho de Oro, donde despliega sol y naturaleza que invita a descansar.
Dejá un comentario
Disculpa, debes iniciar sesión para escribir un comentario.