Agradable sorpresa es encontrar un paraíso escondido detrás de los cerros. Así se siente cuando luego de recorrer unos 15 km. desde la capital de Catamarca, por la Ruta Provincial Nº 156, se llega a las termas de Fiambalá. Un camino asfaltado y accesible nos permite recorrer paisajes increíbles para encontrar como destino algo más increíble aún: unos 15 piletones de rocas autóctonas rodean el curso del río que baja por la montaña y se disponen entre la naturaleza y un horizonte infinito.
Más información de Termas de Fiambala, http://www.argentinaturismo.com.ar/fiambala/termas.php
Alojamientos en Fiambala, http://www.argentinaturismo.com.ar/fiambala/alojamientos.php
Lo acoge su belleza natural a la que acompaña con los servicios importantes para complacerse plenamente como son baños y vestuarios, mesas, parrillas, bancos para comer y compartir en familia y un bar-restaurant con terraza para disfrutar del menú o hacer pedidos de viandas. Se pueden alquilar batas y toallas para la salida del agua. Para los que deciden pernoctar pueden optar por el camping, cabañas, una mini-hosterìa y dormy.
El predio comienza a funcionar muy temprano, a las 7 hs. y cierra a las 10 de la noche. Para los que no disponen de autos llega hasta allí el servicio de bus.
Las Termas de Fiambalá se enmarcan en los denominados regalos de la naturaleza de los que hay que disfrutar.
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