Si bien los fines de semana largos han sido propicios para escapadas, el verano sigue siendo la vedette de las estaciones para planificar las vacaciones tan deseadas. En este sentido las opiniones se dividen, hay quienes adoran la playa y el sol y quienes por su parte huyen despavoridos de las altas temperaturas.
Para encontrar el punto medio nada mejor que un verano en el sur. Sus lagos, bosques, montañas, pueblos y las temperaturas moderadas constituyen un paisaje con muchas posibilidades de diversión y paseos. Ya sea Ushuaia, en la provincia de Tierra del Fuego, Villa Pehuenia, en el centro de Neuquén, El Calafate, Esquel, El Bolsón, Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de Los Andes y un sinfín de destinos maravillosos, pueden ser la opción diferente a la clásica costa atlántica.
En estos paisajes que embellecen es muy fácil pasarla bien con un plan sencillo como pasear en bicicleta, cabalgar, caminar, pescar o contemplar. Y por supuesto también dedicarle un tiempo a las actividades de aventura como rafting en aguas transparentes con montañas ostentosas como telón, kayak o stand up paddle, deportes acuáticos por lagos y ríos, etc., toda actividad tiene su atracción.
Para comer hay opciones de platos diferentes y exquisitos, picadas de ahumados y cerveza artesanal, comidas tradicionales, postres muy cargaditos para golosos, platos vegetarianos o de autor. El abanico de oportunidades del sur es gigantesco, con todos los servicios y entretenimientos dispuestos para el turista que viene en familia, con grupos amigos, solo o en pareja.
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