En la ciudad de Carhué, Buenos Aires, se acaba de inaugurar un complejo termal único en el mundo, y sin exagerar puede decirse que es único por la condición de sus aguas. Las mismas son hipermineralizadas, contienen 10 veces más salinidad que la del mar lo que permite que la gente que se introduce flote completamente.
Estas aguas adquirieron fama internacional cuando en el año 1917 entraron en el Libro de Récords Guinnes, cuando flotaron simultáneamente en ellas 1941 personas.
A este atractivo único natural se le sumó la construcción de un complejo privado que tiene por objetivo reposicionar a la ciudad como punto turístico.
Entre los servicios que ofrecerá el complejo se destacan una pileta dividida en tres partes con dos laterales para entrar y permanecer de pie, flotar, y moverse; una gran pileta central que asimila a un gigantesco jacuzzi en el que las personas pueden estar sentadas o recostadas y disfrutar de los juegos de agua.
También habrá salas de descanso con reposeras, mesas y sillas; solárium; baños con duchas, lockers y vestidores; seis gabinetes para masajes, estética y fangoterapia; restaurant; servicio de confitería y buffet exclusivo para las personas que concurren al parque termal.
El proyecto del parque prevé otras dos etapas futura, “el segundo y tercer módulo de piletas climatizadas con agua del lago Epecuén, una de agua dulce y un piletón lúdico de 4.000 metros cubiertos para el verano.
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