Emplazado en una zona montañosa y de profusa vegetación, El Sauce tuvo su época de esplendor cuando era espacio de producción de la cal El Milagro, empresa que llegó a contratar a 700 obreros. Pero cuando ésta cerró, muchos abandonaron el pueblo.
Ahora, la actividad central es la molienda de piedras para pavimento y lozas.
El lugar conserva una capilla cuyo patrono es San José; una escuela y un club.