Una de las antiguas edificaciones que hacen a la historia de Aguas de Oro es el Convento de la Santísima Trinidad. Por Avenida Costanera, acompañando el cauce del río, se accede a este sitio de oración.
Fue construido a partir de las características del estilo neo-barroco español. Posee un hermoso patio interno con la imagen de la Virgen de Lourdes, en una antigua gruta conformada por rocas de la zona. Cuenta además con una pequeña capilla que es de uso exclusivo de las únicas tres hermanas franciscanas que habitan en el lugar.