La calle de las estrellas, la fama, el glamour y la cultura, Avenida Corrientes reúne en su extensión los más reconocidos teatros y bares, los más célebres centros culturales, y en el centro, ostentoso e imponente, el emblemático Obelisco, símbolo arquitectónico de Buenos Aires.
Imagen - Argentinaturismo.com.ar
Es sobre la Av. Corrientes de la Capital Federal que el arte se trepa a las tablas para arrancar emociones del público expectante. Así, las salas del Teatro Ópera, inaugurado en 1936, y del Teatro Gran Rex, con su capacidad para 3300 espectadores, sirven de escenarios a importantes espectáculos internacionales; mientras que el Teatro Maipo, pionero en la Revista Argentina, presenta importantes actores y músicos locales. Se agregan al circuito el reconocido Teatro Lola Membrives; el Teatro San Martín con sus dos elencos estables y precursores a nivel nacional: el Ballet Contemporáneo y el Grupo de Titiriteros; el Teatro Presidente Alvear, sus mil localidades y su moderna infraestructura técnica; el tradicional Teatro Nacional y el Teatro Blanca Podestá.
El Estadio Luna Park, también conocido como el “Palacio del Deporte”, célebre por sus competencias de boxeo, aunque ya diversificado en sus espectáculos deportivos y musicales; el Paseo La Plaza, que reúne salas de teatro, bares, restaurantes, paseo de compras; y el Centro Cultural de la Cooperación, adornado con murales de distintos artistas plásticos, completan la propuesta artística de la calle Corrientes.
Imagen - Argentinaturismo.com.ar
El Obelisco, inaugurado en 1936 y consagrado como punto de reunión para manifestaciones y festejos; el Café La Paz recordado por su influencia en la década del ‘60; el Café La Giralda, centro de reunión de la intelectualidad porteña; y el Café El Estaño, tanguero por tradición; agregan atractivo a la Avenida llevándolo más allá de la ficción.