Refugio de tranquilidad, espacio de retiro placentero,
La Cruz es un poblado del
Valle de Calamuchita, inmerso en el paisaje de las sierras del sur y cruzado por las mansas aguas del
Río de Los Sauces.
El embalse y la represa hidroeléctrica de
Río Tercero asentados en las proximidades de
La Cruz; la capilla y la plaza señaladas como el espacio donde tuvo su origen el pueblo; el monumento elevado en homenaje al nombre del mismo; el espléndido
balneario y el magnífico entorno natural hacen a la propuesta turística de este rincón del valle donde hallar la más sublime serenidad sin riesgo de aburrimiento, porque aquí la aventura puede cruzar las sierras en
MotoCross o
4x4, o lanzarse al galope por los senderos.
La temporada turística de
La Cruz tiene su apertura cada 26 de diciembre para cerrar a fines de febrero. Durante ese lapso de tiempo, los visitantes se instalan en departamentos y cabañas de alquiler, así como en el
camping municipal extendido sobre la rivera norte del río que serpentea el territorio.
Historia de La Cruz
Estas tierras, conocidas en la época de la conquista española como
Acapiche o
Coya Piche, fueron entregadas a un Capitán de Luis de Cabrera y posteriormente pasaron a las Hermanas Catalinas, quienes en 1625 cedieron sus derechos a Don Domingo Valladares.
El nombre de La Cruz data de los primeros años del siglo XVIII y encuentra su origen en la actitud de una persona que colocara una crucecita de hierro en la grieta de un árbol donde un hombre perdiera la vida a causa de un rayo. Desde entonces, la cruz fue un punto de referencia y al paraje se lo conoció como
Paso de la Crucecita.
La construcción de una
capilla de paja y barro daría comienzo al asentamiento poblacional en los alrededores de la misma, hasta que el
11 de mayo de 1870 un Decreto Provincial encargó la traza y delineación de la villa denominada
La Cruz, considerándose tal fecha como la de su fundación.