Así se llamó en sus mejores momentos lo que es hoy el Camping Comunal. Entonces, llegaba a recibir en la época de verano más de 5 mil personas decididas a disfrutar del bien cuidado lugar, su playa espectacular, sus vestuarios, sus áreas acondicionadas para los apasionados por el campamentismo, y sus casitas de fin de semana.
Las sucesivas crecientes del río Carcarañá fueron empañando el encanto del lugar, que actualmente persiste en el intento de recuperar viejas épocas.