Rodeada de la belleza desmesurada del
Parque Nacional Los Alerces,
Villa Futalaufquen invita a deleitarse con la naturaleza en estado puro y la tranquilidad en su máxima expresión. Bosques milenarios, espejos de aguas azules, y un mágico ambiente de montaña, son los tesoros más preciados que este rincón patagónico le regala a sus visitantes.
Invadida por el verde, y a orillas de un majestuoso lago, aparece salpicada por construcciones dispersas que se comunican entre sí a través de agrestes senderos.
Hosterías, cabañas y campings, emergen entre estos paisajes de altos alerces, garantizando una estadía confortable que no defraudará a quienes lleguen a
Villa Futalaufquen en busca de la serenidad única que ostenta.
También se puede disfrutar de otros servicios como
un restaurante y una
proveeduría. Además allí también funciona la Intendencia, el Centro de Informes, y la administración del Parque Nacional Los Alerces: estos lugares resultan de vital importancia a la hora de encontrar información y asesoramiento para recorrer esta área protegida.
Más de veinte
senderos peatonales, numerosos caminos vehiculares, y sendas habilitadas para
cabalgatas y ciclismo se desparraman por doquier, permitiendo descubrir las peculiaridades de este ambiente fascinante que rodea a
Villa Futalaufquen. Se suman otras propuestas como el
trekking; safaris fotográficos, o
lacustres hacia el alerzal milenario, completando una cartelera atrapante para vivir con todos los sentidos.