Al pie del arenoso e imponente Cerro Huancar, Abra Pampa se ubica en un llano tapizado por algunos cultivos de vegetales y campos dedicados a la cría de caprinos y camélidos. Con el aire inconfundible del norte argentino, es un cúmulo de sorpresas para ir descubriendo a cada paso.
Resabios de culturas indígenas, sobreviven aún en este destino del Departamento Cochinoca. Los habitantes coyas mantienen viva su cultura celebrando sus rituales y fiestas: el ritual de la Pachamama es uno de los más importantes. Cada año, en la base del Cerro Huancar, los lugareños cavan un pozo y depositan sus ofrendas: vino, locro, cerveza de maíz y hojas de coca se ofrecen a la madre tierra mientras se elevan las oraciones para que el trabajo que comienza culmine con buenos resultados.