Gran centro industrial y de servicios, la ciudad de Bahía Blanca surge en el ángulo sur que da fin a la panza de la provincia de Buenos Aires, a la vera de la bahía que le da nombre y a 10Kms. del Mar Argentino. De encantador paisaje entre costero y urbano, y de fuerte identidad cultural, esta porción de territorio argentino desafía el atrevimiento de superar la pampa húmeda llegando hasta ella.
Imagen - Gentileza de la Secretaría de Turismo de Buenos Aires
Bahía Blanca cuenta con el mayor puerto nacional de aguas profundas, el Ingeniero White, apto para recibir cruceros, y caracterizado por su entorno de casas de chapas, calles empedradas y cantinas típicas. Siendo este, además, un espacio significativo de la historia local por el impulso dado desde siempre al desarrollo económico-social.
La residencial Avenida Alem, el magnífico Teatro Municipal, el imponente Parque de Mayo, el Parque Independencia y el Jardín Zoológico emplazado en su extensión, el artístico Paseo de las Esculturas, hacen atractivo el recorrido por la ciudad, completándose este con la antigua Plaza Rivadavia, en torno a la cual se desarrolla la actividad comercial, institucional y hotelera que de lugar a la conformación del microcentro bahiense.
Imagen - Argentinaturismo.com.ar
Dividida en un centenar de barrios, la ciudad de Bahía Blanca yace atravesada por el encantador Arroyo Napostá, cuyo recorrido hacia la desembocadura ha sido entubado en gran parte del trayecto urbano.
Museos diferenciados y complementarios, entre los que es válido destacar el Museo del Puerto y el Museo Ferroviario, cierran la propuesta turística de Bahía Blanca con un distintivo toque cultural y creativo.