La ciudad de El Bolsón se alza en el sudoeste rionegrino, reglando un entorno paisajístico de montañas y bosques que parecen resguardarla. Elegida por los amantes de los encantos andinos, las actividades al aire libre, y la naturaleza en estado puro, también resulta un destino indicado para visitar durante la época estival.
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El majestuoso Río Azul bordea a esta atrapante comunidad patagónica, haciendo honor a su nombre y regalando toda su frescura cristalina. Serpenteando entre una vegetación de diferentes verdes, que trepa hacia las laderas, invita a disfrutar de sus playas agrestes con todos los sentidos: caminar por la zona costera; tomar refrescantes baños; disfrutar de un día de camping; o simplemente sentarse entre las rocas a contagiarse de la tranquilidad del lugar, son algunas de las alternativas que se proponen.
Quienes busquen más ambientes lacustres podrán recorrer unos kilómetros hacía el sur y maravillarse con el Lago Puelo: conocido como uno de los sitios predilectos de los veraneantes patagónicos, cuenta con un sector conocido como La Playita que regala un lento declive de arena. Debido a esta característica tiene varios metros de poca profundidad, lo que sumado a su calidez y color turquesa garantiza una experiencia encantadora.
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Esta atractiva propuesta también se puede complementar con otras que invitan a descubrir la belleza y la magnificencia de los paisajes aledaños. Paseos lacustres, avistajes de aves, cabalgatas, y senderismo serán algunas de las opciones que podrán elegir los visitantes.
