Entre esteros, riachos y el murallón verde del monte formoseño, General Manuel Belgrano se alza entre paisajes bendecidos por una agreste belleza. A 250 kilómetros de la Ciudad Capital se aleja de la vida vertiginosa y espera a sus visitantes sumida en una encantadora sensación de tranquilidad.

Esta localidad se comunica con Paraguay a través del Puente Internacional “Juan D. Perón”, que atraviesa el Río Pilcomayo y llega a la ciudad de General Bruguez. Esta peculiaridad la hace un destino de paso obligado para quines de dirigen al país vecino…vale la pena realizar una parada y conocerla.

Ostentando espacios verdes muy amplios y que permiten deleitarse con el aire puro que invade esta porción del Departamento Patiño, la Plaza Juan M. de Rosas sorprende con su moderno diseño: el centro es un gran círculo blanco rodeado de bancos y columnas metálicas que se elevan y redondean en su parte superior. Rodeando esta estructura, que se asemeja a un pequeño anfiteatro, se pueden observar palmeras y jardines; juegos para niños; y perfectas ligustrinas que dan la bienvenida.

Otros sitios para descubrir son la Plaza Valerio Escalante; la Iglesia San Isidro Labrador; el Polideportivo Municipal y la cercana Laguna Montanaro. Alejándose de la ciudad, los campos sembrados de algodón, forestados, o dedicados a la ganadería serán las postales más típicas de la zona.