Símbolo del pueblo de Quequén, postal turística del ambiente que ilumina, custodio imponente y solitario de la extensión a su alcance, el Faro de Quequén custodia la zona desde el año 1921.
Una admirable escalera caracol conforma el interior de la magnífica estructura, mientras sus más de 30 metros de altura, y el foco con potencia de 400w y alcance de 45 Kilómetros, permiten obtener desde la torre del Faro una deslumbrante vista panorámica.
Se alza en la pequeña Quequén con la mirada fija en el paisaje necochense.