Mirador natural desde el cual puede obtenerse una vista panorámica de toda la ciudad de Neuquén, del cauce inferior del Río Neuquén, del área productiva con sus chacras y surcos, de la vecina ciudad de Cipolletti, y de las típicas bardas existentes en la región gracias a la continua acción del viento sobre el suelo neuquino.
Conformado por obra de la naturaleza, este balcón se originó a raíz de movimientos internos de la tierra, y la posterior acumulación de sedimentos fluviales arrastrados y desperdigados por los ríos Neuquén, Limay y Negro que cruzan la región. Toda una acción espontánea de la Madre Tierra que ha posibilitado la existencia de este encantador balcón que da lugar a la contemplación apacible de bellezas.
Cercano y accesible, aunque situado en las afueras de la ciudad, Balcón del Valle funciona como un considerable pulmón verde dónde oxigenarse, realizar caminatas, y vencer el estrés al menos un instante.
Para acceder a este mirador se debe transitar por Av. Argentina hacia el norte, hasta llegar a la Plaza de las Banderas, entonces girar hacia el este y continuar el recorrido hasta llegar a destino.