Magnífico yacimiento de arte rupestre donde las pinturas fueron realizadas sobre aleros verticales de un inmenso peñasco. Según los estudios realizados sobre ellas, contarían con una amplia antigüedad y representarían escenas religiosas y rituales. Ocres, negros y rojos trazan sobre las rocas círculos concéntricos, zigzag, puntos bicolores y líneas erráticas sin que se consiga develar con certeza los significados de los mismos.
Se accede a este místico lugar tras recorrer 13,5Kms. desde San Francisco del Monte de Oro, partiendo por el camino que conduce a Carolina.
Otro interesante yacimiento de estas características culturales es el denominado Piedra del Santo. Esbozadas dentro de una cueva a unos 10Kms. de San Francisco, estas pinturas requieren de luz artificial para su admiración, y consisten en trazos bicolores blanco y ocre- los cuales delinean una cruz de doble contorno, cuadriláteros, circunferencias, polígonos y líneas.