Ciudad capital dueña de inmensas bellezas paisajísticas, al cual le concede la mejor de las satisfacciones con sus contrastes de formas y colores, con su territorio colmado de espectáculos programados por la naturaleza.
Es una de esas celebraciones que invitan a descubrir la riqueza cultural. En homenaje a esta prenda argentina, que sabe como proteger del clima adverso y se ha transformado en uno de los símbolos de estas tierras.
Desde el ejido mismo de la ciudad hasta un poco más allá, el campo se extiende derrochando su rústica seducción y atrapando a quienes en busca de tradición, sabores y/o confort, llegan hasta estas distancias del noroeste.
Fundada inicialmente en 1558 en el Valle de Quinmivil; en 1591 se produjo su refundación, hasta que, en 1683, Fernando Mendoza de Mate de Luna, le dio su ubicación actual.
Sierras, ríos, lagunas proporcionan el ámbito ideal para el desarrollo de actividades como trekking, mountain bike, travesías en 4x4, y cabalgatas por sitios escabrosos.