La Fiesta Nacional del Poncho es una de esas celebraciones que invitan a descubrir la riqueza cultural de su comunidad. Es un homenaje a esta prenda argentina por excelencia, que sabe como proteger del clima adverso y se ha transformado en uno de los símbolos indiscutibles de estas tierras catamarqueñas. Y es aquí precisamente, en estas postales del noroeste, dónde el trabajo en los telares regala los tejidos de mejor calidad en el mundo.
Imagen - Gentileza de la Secretaría de Turismo de Catamarca
Durante diez días del mes de julio, esta celebración colma el Predio Ferial invitando a turistas y lugareños a disfrutar de una variedad de propuestas. Sin duda que la Feria de Artesanos será uno de los paseos ineludibles: exhibiendo una diversidad de ponchos, realizados con diferentes técnicas, convoca a expositores de diferentes provincias y países latinoamericanos, que llegan a Catamarca para mostrar estas hermosas obras de arte realizadas con sus manos.
Con más de cuarenta ediciones, la cartelera suma importantes artistas nacionales que regalan espectáculos de primer nivel. Las danzas típicas no quedan afuera, siendo fielmente representadas por los ballets locales e invitados. Todas estas actividades se desarrollan en el Escenario Mayor, el Salón de la Cultura y en el Festival Infanto-Juvenil Ponchito.
Imagen - Gentileza de la Secretaría de Turismo de Catamarca
Pero esto no es todo: los platos de la gastronomía regional son otros de los atractivos indiscutibles para quienes disfrutan de la fiesta. Con aromas y sabores propios, cada menú resulta una tentación difícil de resistir.