Una rica fauna íctica se suma: especies como el dorado, surubí, pacú, manguruyú, piró-pytá, armado, y boga, recorren estas aguas dulces para atraer a visitantes que ansían lanzar sus anzuelos y obtener grandes capturas.
Bellezas incomparables, riesgo y adrenalina y serenidad, este espacio misionero es capaz de resistir cualquier adjetivo calificativo halagador y, sin embargo, ninguno es suficiente para describirlo.
Único lugar en el mundo donde dos ríos dividen tres países: Argentina, Brasil y Paraguay. Espacio magnífico donde tres culturas se encuentran consumando el atractivo de las imponentes Cataratas.
La región que hoy se conoce bajo la denominación de Iguazú, y que comprende a Brasil, Paraguay y Argentina, estuvo ocupada desde tiempos inmemoriales por la cultura guaraní.
Magnífico lugar conocido por sus yacimientos de piedras semi- preciosas, turquesas, amatistas y cristal de roca. Es una excursión obligada para todos aquellos que llegan hasta las Cataratas.
La Garganta del Diablo, y otros 275 saltos caen estrepitosamente en infinidad de cascadas, deslumbrando las miradas atónitas y tentando al riesgo.
Esta aripuca simbólica pretende atrapar la conciencia de los visitantes demostrándoles la majestuosidad de los árboles de más de 300 años que la constituyen y la necesidad de proteger la naturaleza.
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