Conocido como el Portal de la Quebrada de Humahuaca, la pequeña localidad de Volcán es un destino ideal para los amantes de la tranquilidad y la naturaleza en toda su expresión. Rincones que desbordan de belleza son una tentadora invitación para recorrer los coloridos cerros y maravillarse con cada tesoro que el visitante podrá descubrir.

El Río Grande vigila a esta comunidad jujeña con todo su esplendor, pero atravesándolo un verdadero espectáculo se llevará toda la atención: en uno de los cerros cercanos se encuentra una vertiente que expulsa el agua más cristalina y la lanza durante 20 metros formando la hermosa Cascada de Santuyo.

Otros sitios imperdibles son los escenarios lacustres: unas más cercanas y otras más alejadas del pueblo, las lagunas invitan a disfrutar de todo su esplendor con caminatas por senderos que bordean sus orillas y permiten observar la flora y fauna autóctona. Una propuesta muy tentadora para empaparse con el aire puro que invade este rinconcito de la Provincia de Jujuy.

Pero esto no es todo: su relieve montañoso se elevan por más de 2000 metros y convoca a los visitantes más aventureros. El parapente es una de las disciplinas más elegidas para obtener las mejores vistas panorámicas de este destino privilegiado con un ambiente de transición, dónde la frondosidad y el verde de la región de los valles se va transformando en la aridez colorida de la quebrada.

Quienes gusten de la arqueología podrán llegar hasta el Pucará de Volcán, un yacimiento de una antigua comunidad indígena que permite conocer la forma de vida de los primeros habitantes de Volcán. Se observan algunos restos de viviendas y murallones ubicados estratégicamente entre los barrancos para evitar los ataques de los enemigos.