Sencilla, pintoresca y punto de partida a muchos sitios encantadores de La Rioja,
Patquia cuenta con una ubicación privilegiada en el centro del territorio provincial. Rodeada por la combinación de los llanos y algunas cadenas serranas, sus paisajes son la mejor excusa para visitarla.
Imagen - Argentinaturismo.com.ar
Tomando la Ruta Nacional Nº 74, los
Mogotes Colorados hacen honor a su nombre y regalan un estallido de color entre la aridez que abunda por estas latitudes. Adoptando las formas que el fuerte viento cuyano le va otorgando, estas formaciones de areniscas son uno de los sitios imperdibles. Con su impactante color rojizo, se elevan como bloques y forman una postal con un inconfundible sello riojano.
Este relieve tan peculiar también ha sido protagonista de la historia regional: muy cerca se puede encontrar la
Cueva del Chacho, una grieta ubicada entre dos paredones de arenisca que fue utilizada como refugio por el Caudillo Angel Vicente Peñalosa.
Quienes se maravillen con la geografía que expone esta porción del territorio argentino, pueden tomar la Ruta Nacional Nº 150 y descubrir la inmensidad del
Parque Nacional Talmapaya.