Av. 9 de Julio: destacada por ser una de las más anchas del mundo (mide 140mts.), esta avenida comprende 25 cuadras hacia el norte y otras 25 hacia el sur del Obelisco. Llevando como nombre una importante fecha de la Historia Argentina, la 9 de Julio exigió la demolición de numerosas manzanas a principios del Siglo XX para comenzar a circular por Buenos Aires.
Hoy puede vérsela grandiosa y hermosamente forestada con especies como jacarandá y palo borracho.
Av. Corrientes: escenario y protagonista del espectáculo y la movida nocturna, esta avenida concentra todo el brillo de la ciudad en su extensión. En 1936, año de inauguración del Obelisco, Corrientes fue ensanchada instalándose a su vera restoranes, cafés, librerías, cines, teatros y otros tantos complejos donde disfrutar de las más atrapantes obras nacionales y extranjeras.
En la intersección de ambas avenidas se alza imponente el símbolo máximo de Buenos Aires el Obelisco, convirtiendo este espacio en el centro del centro.