Desde la orilla de diques o lagos artificiales, con cañas de fondo o media profundidad, o desde la costa en los arroyos de alta montaña, los pescadores encuentran en la provincia de Catamarca un sitio ideal para desarrollar su actividad.
Imagen - Secretaría de Turismo de la Provincia de Catamarca
Un oasis en el desierto de La Puna, Antofagasta de la Sierra, guarda el arco iris multiplicado en sus espejos de agua. Aquí, la pesca de truchas es casi un ritual, conocido y disfrutado por unos pocos que llegaron hasta este rincón de la provincia, tal vez por casualidad.
Esta especie multicolor también puede encontrarse en el Río de la Punilla, alimentado por manantiales y nieves eternas, aunque difícilmente aparecen ejemplares de más de 2 Kilogramos. Las cucharitas voladoras suelen ser los señuelos más eficaces, aunque de todos modos los lances deben ser repetitivos y persistentes si desean ser exitosos.
Pesca de pejerreyes y percas en el Dique Embalse Ipizca; pesca de altura en el Aconquija; pesca de magníficas truchas en el Departamento Ambato; los cursos de agua de Catamarca constituyen una especial atracción para los pescadores, tornándose centro de reunión y desafío durante cualquier época del año.